Sin duda que Valladolid sonará de forma distinta a partir de ahora para Maxi Grabiel y Agustín Gómez Silingo. Con lo caro que está cada titulo del Pádel Pro Tour, y la dificultad de vencer en última instancia a Juan Martín Díaz y Fernando Belasteguín, su victoria a orillas del Pisuerga tiene un valor especial.
El Pádel federativo se preparába para la disputa del mundial de Canada, y no podía hacerlo de una forma más nefasta (por parte de sus dirigentes) que dejaban fuera del equipo a sus principales valores femeninos. Todo un descredito para nuestro deporte.
Pero no todo el pádel está en disputa, los torneos amateur dan vida a un deporte que aún permanece muy alejado del pádel de primer nivel. Muchos son aún los que desconocen los nombres de los nº1, y mucho menos los han visto jugar. Esperemos que poco a poco la difusión de los torneos del circuito profesional permitan cambiar esta dinámica en la que “Juan Martín” es solo un jugador más de 1ª categoría.